Las formas de cortejo de los duendes son muy originales, estos consideran un gran cumplido el recibir una rosa con un nudo hecho en el tallo. Algunos duendes prefieren el camino más fácil y le dicen a la rosa que se haga el nudo ella misma, para lo cual convencen a la pobre flor de que el sol se mueve trazando complicados círculos, eso sin embargo, se considera un engaño correcto y las duendes tienen medios para determinar si ha sucedido así.
El rechazo definitivo de un pretendiente se produce cuando la duende corta el nudo y devuelve el regalo.
El galanteo es algo más en su cultura ya que tienen una música que se presta a que se produzcan estos encuentros en los que los pretendientes llevan como amuletos de su suerte para el éxito, la rosa con un nudo, el trébol de cuatro hojas y un regalo que a menudo es una caja de sorpresa.