Claro está que la miel también forma parte de sus manjares más preciados, así como lo es el jengibre. Una cestita de jengibre con miel en el jardín será el banquete ideal para estos seres mágicos, por más tímidos que sean.
Los champignons también están en la dieta de las hadas más sibaritas. Aunque no producen leche en sus comunidades, disfrutan de la oportunidad de poder apreciarla. También gustan de la cebada y, claro está, del chocolate, la golosina del corazón.
En cuanto a sus bebidas, las hadas son unas verdaderas creativas de los elíxires, que van dejando gustos, retrogustos, recuerdos y notas a su paso. ¿Qué diferencia hay entre una bebida referescante y una pócima para surfear el arcoiris? Ninguna. El más delicioso licor para olvidar el frío del invierno, también descongela el corazón más rígido y hace brillar los ojos vencidos.
Tantas cosas habrá también que todavía no nos han contado… Me gusta que así sea, que todavía haya secretos, delicias y magia por descubrir. Acá van unas recetas mágicas para compartir con tus hadas preferidas:
Pan de Miel y Jengibre
Mantequilla 230 g
Azúcar negra 1 taza
Miel 100 g
Jengibre 15 g
Huevos 3
Leche 100 cc
Harina 3 tazas
Polvo para Hornear 2 cditas.
Canela en polvo 1 cda.
Colocar en una cacerola la manteca, junto con el azúcar negra, la miel y el jengibre - fundir.
Retirar del fuego, dejar que llegue a temperatura ambiente e incorporar los huevos y la leche.
Por último, agregar la harina tamizada con el polvo para hornear y la canela.
Volcar en un molde untado con manteca y espolvoreado con harina.
Cocinar en horno a 170 ºC por 45 minutos aproximadamente.
Retirar del horno, dejar enfriar y luego desmoldar.
Galletas de Jengibre y Canela
Harina 2 ¾ tazas
Jengibre molido 2 cditas.
Bicarbonato 1 ½ cdita.
Canela Molida 1 cdita.
Clavos Molidos ½ cdita.
Nuez Moscada ½ cdita.
Mantequilla a temperatura ambiente ½ taza
Azúcar negra ½ taza
Miel ½ taza
Huevos 1
Cernir todos los ingredientes secos, menos el azúcar. Dejar reposar.
Batir la mantequilla hasta tener una mezcla blancuzca.
Añadir el azúcar y batir hasta que esponje la mezcla. Enseguida añadir la miel y luego el huevo.
Batir bien hasta tener una mezcla tersa y homogénea.
Añadir los ingredientes secos e incorporarlos con una espátula.
Con la masa obtenida, que es un poco suelta, hacer 3 bolas del mismo tamaño. Con la mano darles forma - después ponerlas en plástico autoadherible, cubrir bien y haciendo presión formar discos de masa de más o menos 2 cm de alto.
Llevar a refrigeración por 4 horas.
Sacar la masa, dejarla fuera del refri unos 10-15 minutos antes de palotear y extender a un grosor delgado, como de 5 mm, cortar las figuras deseadas, poner en charolas con papel encerado o papel para hornear.
El horno deberá estar precalentado a 180 ºC. Hornear unos 10 minutos - también depende del tamaño de las galletas. Estarán cuando las orillas estén ligeramente doradas.
Sacar, dejar reposar 1 minuto y después poner sobre una rejilla para que enfríen.
Con esto y una taza de chocolate con leche caliente, el tiempo no pasa, el aquí-ahora se impone irresistible. No queda más alternativa que disfrutar de la vida con todos los sentidos.
Suerte, Alegría, Magia y Abundancia.
