

Gnomo significa hombre de la tierra o espíritu de la naturaleza. Estos seres están presentes en muchas culturas con distintos nombres.
Por ejemplo, los aborígenes sudamericanos convocaban al espíritu de la Pachamama (Madre Tierra), el Sol, el agua y cada especie. En otros países se les definió como duendes, gevas o genios.
Antes de talar un árbol que necesitan, los aborígenes le piden permiso a su espíritu. Asimismo, antes de cazar un animal solicitan autorización a la Naturaleza.